XCOM: Chimera Squad – Análisis
La franquicia de XCOM ha visto cambios fundamentales, para bien o para mal, desde su incepción inicial en los noventas bajo el nombre UFO: Enemy Unknown. A través de los años ha buscado el balance entre accesibilidad y dificultad, enfrentando a cada paso la crítica de los fans de la franquicia. Es así como ahora nos llega XCOM: Chimera Squad. Un spinoff canónico de la saga en el cual la línea que separaba a los aliados de los enemigos se ha tornado borrosa.
Juego: XCOM: Chimera Squad
Género: Estrategia por turnos
Subtítulos: Inglés, Español de España, Italiano, Francés, Alemán, etc.
Doblaje: Inglés, Español de España, Italiano, Francés, Alemán, etc.
Jugadores: 1 en solitario
Desarrollador: Firaxis Games
Distribuidor: 2K
Plataformas y fecha de salida: 23 de abril para PC via Steam
Precio inicial: $19.99
Un nuevo y complicado mundo
Años después de la sangrienta guerra contra la ocupación extraterrestre narrada en XCOM 2 la humanidad, junto con una buena parte de la población alienígena, han entablado una frágil tregua en City 31. La adaptación de muchos de estos visitantes a la vida en la Tierra, así como la aparición de una nueva generación de híbridos, ha contribuído a uno de los ecosistemas interespecíficos más interesantes de la ciencia ficción. Esto, como podrás imaginarte, ha acarreado no solamente efectos positivos, sino un delicado balance político y social. Es aquí donde entra en escena Chimera Squad, una subdivisión de XCOM para operaciones especiales.
Este escuadrón entra en escena cuando un conflicto aparece en la ciudad y la policía no se siente capacitada para lidiar con él. Varias facciones operan dentro de la ciudad, con sus intereses particulares. Algunas de ellas ocultan propósitos nefastos, haciéndose pasar por grupos de resistencia o por cultos en búsqueda de justicia social. Investigarlos, enfrentarlos y finalmente detenerlos será tu labor, salvando así a la ciudad de caer en la anarquía.
Dentro del escuadrón, encontrarás miembros con todo tipo de trasfondos. Algunos de ellos son parte de la fuerza policial desde años, otros buscan redención por sus actos durante la guerra. Otros, llamativamente, son todavía renuentes a vivir en paz con la humanidad. Estos trabajarán en equipo con el fin de limpiar su expediente y, sobre todo, evitar la pena de muerte. Esta variedad de personajes, algunos de ellos mezclas genéticas entre humano y extraterrestre, dan pie a interesantes interacciones entre ellos. Aunque no son tan frecuentes o profundas como desearía, siempre son interesantes de escuchar. Sirven también para dar desarrollo a los personajes del escuadrón de forma orgánica.
Esto es algo nuevo para la saga de XCOM. Anteriormente, como regla general tus miembros de escuadrón eran personajes autogenerados. El apego emocional que tenías con ellos iba más del lado de sus habilidades que de su personalidad.
Incluir miembros de escuadrón con personalidades definidas es un cambio para bien en mi opinión. No obstante, acarrea algunos cambios en jugabilidad divisorios que mencionaré más adelante. La intención de este spinoff es evidentemente jugar con los elementos que componen la receta de XCOM. Es así como traen varias ideas nuevas a la mezcla desde varios puntos de vista. Entre ellos, debo hacer hincapié en su manejo del tema de la inclusividad. Este normalmente atrae mucha atención negativa cuando se siente forzado. Sin embargo, dentro del contexto bélico de la historia se evidencia de forma orgánica, haciendo la trama más interesante.
El peso de un legado
Utilizar la marca XCOM conlleva tantos pros como contras, como bien lo saben los desarrolladores del otro conocido spinoff, The Bureau: XCOM Declassified. Si bien estos juegos gozan de una reputación que crea anticipación ante nuevas entregas, también posee una de las comunidades más estrictas y apasionadas. Cada nueva iteración en la franquicia es recibida con interés e invariablemente criticada por los cambios que el equipo de desarrollo implementa. Estos siembre buscan mejorar la experiencia de juego para un público más grande. Aun así, sus juegos han logrado mantener su idiosincrasia por ya más de tres décadas. La mayoría de estos han sido en su gran mayoría para bien, ya sea que inicialmente sean del agrado de la comunidad o no.
Al igual que su nueva dirección artística llena de neones fucsias y morados, la jugabilidad de XCOM: Chimera Squad tiene estilo propio. Este puede considerarse como una variante más arcade de la línea original. El género en sí ha visto reinvenciones modernas interesantes gracias a otros títulos como el excelente Mutant Year Zero: Road to Eden y el inesperadamente inspirado Warhammer 40,000: Mechanicus. Siendo así, este título se puede percibir como una incursión segura en conceptos nuevos sin afectar la línea principal de XCOM.
Los cambios son notables desde el primer momento. La presentación del juego es mucho menos sombría y tensa que anteriores entregas. La presencia de extraterrestres como parte de tu escuadrón le da inmediatamente una nueva dimensión a la jugabilidad. Esto es gracias a las habilidades que ahora puedes utilizar y que en probablemente te sacaron canas durante XCOM y XCOM 2.
Además, la estructura de las misiones ha cambiado de forma significativa gracias al modo breach que inicia cada enfrentamiento. En estos, asignas a los miembros de tu equipo a las diferentes entradas del campo de batalla enemigo. Luego, defines las respectivas acciones que tomarán al entrar, considerando las ventajas y desventajas de cada punto de incursión. Una vez hecha la incursión, el tiempo se detiene y puedes escoger el objetivo de disparo de cada miembro. Así, tienes casi siempre una ventaja inicial en los combates.
Una vez que eliminas los enemigos de una locación, inmediatamente entrarás en modo breach hacia la siguiente, según lo requiera la misión. Este cambio es fundamental en la fórmula de XCOM. Entregas anteriores te obligaban a explorar el mapa poco a poco, exponiéndote a un turno enemigo al hacer contacto, como ocurría en XCOM: Enemy Unknown, o bien planear emboscadas si y sólo si podías divisar al enemigo antes de que este se percatara de tu presencia, en XCOM 2. Este nuevo modo puede sonar como un cambio natural o sencillo. En embargo, afecta enormemente el tono de los combates, donde el sentimiento de anticipación y de estar en desventaja era constante.
Otro cambio que ha sido divisorio es el de intercalar turnos enemigos con los de tus agentes. Esto limita la potencia de muchos de tus ataques en equipo. Si bien hay algunas habilidades especiales para sacar provecho de turnos continuos, definitivamente este es otro cambio fundamental que ha resultado divisorio.
La escala de los combates ha disminuído, así como los mapas. Esto no es necesariamente algo negativo ya que va muy relacionado a la temática de escuadrón especial que maneja el juego. Sin embargo, sí puede sentirse como una versión linealizada de los elementos de XCOM. Las labores de administración de tu escuadrón ahora está limitada a mejoras de equipo, misiones secundarias individuales (las cuales son automáticas, consumiendo solamente tiempo), compra de artículos en el mercado negro y la investigación principal de la campaña. Para estas últimas debes completar un número de misiones destacadas, las cuales te acercarán a tu objetivo.
El tiempo de cada misión toma un día y, en típica filosofía XCOM, atender una misión significa ignorar las demás. Deberás escoger sabiamente las recompensas de cada una además de estar al tanto de las consecuencias de no atender situaciones de riesgo en las distintas partes de la ciudad. Por suerte, siempre contarás con la información de las repercusiones de tu próximo turno.
Si la situación de alguna de las zonas empeora demasiado, la anarquía de la ciudad crecerá. Si la anarquía alcanza un nivel crítico, perderás la campaña.
Estos cambios hacen del juego un sabor único de XCOM, lo cual es bueno. Sin embargo, no le es posible escapar de algunos problemas heredados. El motor gráfico del juego tiene tiempo ya de sentirse obsoleto en muchos aspectos. Durante la campaña, es común encontrar bugs como personajes disparando a través de objetos y rutas de movimiento poco naturales. También problemas en la interfaz de usuario para saber qué acción tienes seleccionada y un manejo torpe de cámara tanto entre turnos, como a la hora de resaltar acciones específicas. En el peor de los casos, el juego simplemente se detiene, forzándote a reiniciarlo con la esperanza de que tu último juego salvado no te haga perder demasiado progreso. De estos últimos tuve la desdicha de encontrar cada 2 o 3 misiones en promedio.
El peor ofensor, sin embargo, está en el balance de la dificultad. El juego es indulgente en este aspecto, permitiéndote cambiar la dificultad de las misiones a gusto antes de iniciarla. Esto ha resultado ser la única opción para algunos jugadores que en media campaña han notado picos absurdos en la dificultad sin razón aparente. El ejemplo más claro está en el enfrentamiento final de una de las facciones enemigas, Sacred Coil. Dos de las tres etapas de esta misión son completamente manejables. La etapa final, en cambio, es prácticamente imposible debido a la cantidad de enemigos, refuerzos y combinaciones de ataques que sufres. Este es un problema ampliamente reportado en foros. A la fecha no se han lanzado parches de corrección ni respuesta alguna por parte de los desarrolladores.
Conclusión
XCOM: Chimera Squad es una variante interesante de la receta de XCOM que introduce tantos problemas como las que corrige. El enfoque narrativo de la campaña es el cambio más notable pero no evita que los bugs visuales, de funcionamiento y un desbalance de dificultad le resten buena parte a la experiencia.
Lo Bueno:
- Diseño visual distintivo
- Enfoque narrativo es un plus para la franquicia
- Nuevas mecánicas le dan más balance a los enfrentamientos
- Precio accesible
Lo Malo:
- Bugs visuales y técnicos afectan la experiencia
- Mal manejo de niveles de dificultad
Puntaje:
- Jugabilidad: 5
- Contenido: 7
- Sonido: 7
- Gráficos: 6
