Doctor Strange in the Multiverse of Madness – Impresiones
La fase cuatro del universo cinematográfico de Marvel ha tenido sus altos y bajos con la introducción de nuevos personajes e historias. Sin embargo, la más reciente entrega de esta saga, Doctor Strange in the Multiverse of Madness, ha dado un paso que sin duda será divisorio entre los fans, pero que promete inyectar nueva vida en un género que poco a poco ha ido perdiendo su inercia.
Estilo propio
El director de turno para esta entrega es nada más y nada menos que Sam Raimi, el visionario a cargo de la saga original de películas de Spider-man. No sería exageración decir que es en gran parte gracias a su contribución que el género de superhéroes alcanzó popularidad a nivel mundial de la forma que lo hizo. Su regreso al género no es inesperado. Lo que sí es sorpresa (grata, para muchos) es la libertad que recibió de parte de Disney/Marvel para plasmar su singular estilo en cada escena de esta película.
Para los que nunca han escuchado de él, Raimi es famoso por su singular forma de mezclar el género de horror con elementos caricaturezcos y muchas veces cómicos. Sus entregas más emblemáticas son sin duda las de la saga de Evil Dead, la cual es la muestra mas clara de este particular estilo. Si eres fan, te agradará saber que su mano es notable en esta entrega haciéndola una de las más interesantes en la alineación de Marvel.
Una queja válida sobre el UCM hasta ahora ha sido lo homogéneo en su forma de contar historias. Muchas de las entregas se pueden sentir como copias unas de otras en estilo, estructura, tono e incluso diálogos. Esta metodología funcionó de maravilla en fases anteriores como forma de establecer un universo cinematográfico coherente. Por otra parte, edificó restricciones severas que probablemente han influído en la decisión de algunos directores (como Edgar Wright en el caso de Ant-man) de desistir de los proyectos.
Si esta entrega es seña de un nuevo rumbo para el UCM, parece ser que esta fase estará llena de películas muy interesantes.
Multiverso de oportunidades
Al igual que su predecesora, esta entrega de las desventuras de el Dr. Strange está llena de magia representada en pantalla por una gama de efectos especiales de gran variedad y calidad. Siendo una concepto cada vez más visto en narrativas modernas (Rick & Morty, Everything Everywhere All at Once, SCP Foundation), el multiverso ofrece un sinfin de posibilidades para historias. Marvel parece estar apostando en esta dirección, con historias llenas de elementos mucho más eclécticos e inesperados. De acá en adelante veremos un mundo distinto al cuál no estamos acostumbrados.
El elenco continúa teniendo el carisma que los caracteriza. Los actores más veteranos de la franquicia tienen interacciones entre sí que son simples pero que, para los que conocemos sus pasados, no dejan de sentirse significativas por el peso que acarrean sus palabras. Hay mucho que estos actores pueden hacer con simples miradas y expresiones. Esto es ejemplificado a perfección por Elizabeth Olsen, quien interpreta una Wanda Maximoff que vive aun las consecuencias de los sucesos de Wandavision y tiene un rol fundamental en la historia.
Hay muchas sorpresas que no arruinaré aquí pero que pondrán una sonrisa en el rostro de los fans más antiguos de Marvel. Una fácil recomendación para los que quieren algo distinto dentro del mismo universo que ya adoran.
Doctor Strange in the Multiverse of Madness no es una película perfecta y su estilo probablente no será del agrado de todos, pero es exactamente lo que el UCM necesita y la mejor entrega de la fase cuatro a la fecha. |