Lady Bird – Impresiones

Crecer no es fácil. Enfrentarse a la vida cuando alcanzas la mayoría de edad es una de las etapas más duras, sin embargo es de las más enriquecedoras. De esto se trata Lady Bird, un drama muy bien hecho con retazos de humor y cotidianidad que además de hablar de la típica historia adolescente profundiza con grandeza lo que es la relación entre madre e hija. Y por cierto, si creciste en la década del 2000, esta película podría interesarte ¡veamos!

¿De qué trata?

Lady Bird es el nombre artístico que la protagonista decide ponerse. Para ella representará muchas cosas que veremos a lo largo de su vida adolescente, desde sus últimos años en un colegio católico hasta su desesperado intento por salir de su tierra natal, Sacramento, California para estudiar en la universidad de sus sueños. Pero antes, deberá experimentar los sucesos típicos de todo joven, pero sobre todas las cosas, deberá aprender a llevarse bien con su madre.

Lo Bueno

Considerando lo trillada que es esta temática en el mundo cinematográfico, la directora y guionista Greta Gerwig hace un trabajo fenomenal para relatar las desventuras de Lady Bird. El guión cuenta la historia sin pausas, acorde con la intensa y ajetreada vida de un adolescente, pero logra de forma genuina captar la relación entre la protagonista y su madre.

Esto es genial porque nos permite ver a través de los ojos de Lady Bird todas sus inquietudes y demandas en una familia con muchos problemas económicos que está por enfrentar una recesión a nivel nacional. Dicho aspecto entorpece la búsqueda por un mejor lugar para estudiar para ella. A la vez, podemos empatizar con la madre que tiene que trabajar duro para traer lo necesario, eso mientras su esposo consigue trabajo y los demás hijos abandonaron la universidad.

No puedo olvidar todos esos detalles que me recuerdan la década del 2000, cuando enviar mensajes de texto y chatear por computadora era nuestra única red social del momento, cuando la explosión de bandas musicales independientes y pensamientos anti-guerra afloraban nuevamente, y cuando había un aire tenso de terrorismo en los noticieros. Todo eso y más está bien captado en la ambientación de la película.

No está de más mencionar el trabajo fenomenal de Saoirse Ronan como Lady Bird y Laurie Metcalf como Marion, madre de la protagonista, que juntas son como una montaña rusa llena de altibajos típicos de ese vínculo familiar. Puede que más de uno se sienta identificado.

Lo Malo

Si bien la película goza de buenos planos cinematográficos, su edición no lo es tanto. En varias ocasiones verás tomas con errores visuales un poco visibles, como cambios en la cara o en la posición del cabello en transiciones de escenas. De la misma forma puede que la estructura de la película se sienta como un poco acelerada e inconclusa con algunos problemas que se solucionan fácil, quizá por el intento de Greta por consolidar su inicial guión de 350 páginas en un largometraje de hora y media.

Veredicto