¿Cuántos de nosotros apostamos por la carrera espacial? En Estados Unidos son sólo un puñado de personas y empresas. Y no los culpo, el riesgo de fallo en misiones de investigación y mantenimiento es altísimo. Sin embargo, el presupuesto de la NASA para el 2016 iba de unos $19.3 billones, suficiente para continuar descubriendo mundos allá afuera. Nunca estaré seguro de si realmente llegamos a la Luna, pero todo lo que esta organización hace me ha parecido impresionante y ha aportado mucho conocimiento a la humanidad. Destiny me ha causado una sensación similar. Puede que Bungie haya tropezado con un apurado inicio. Quizá ha tenido que sacrificar a un enorme grupo de fans de Halo, pero a cambio ganó una enorme cantidad de adeptos que han disfrutado las virtudes de Destiny y que también han comprendido esa extraña filosofía del estudio: crea tu propio videojuego aprendiendo de tus caídas. Destiny 2 es la prueba de que un estudio puede mejorar su premisa con el tiempo, tomándose en serio con las críticas que ha recibido.

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Jugabilidad

Destiny 2 es sorpresivamente bueno y, tras terminar su campaña, me ha dejado mucho por hacer, tanto así que favorece la experiencia del juego según hasta donde el jugador quiera realizar. Digo sorpresivamente, porque en mis impresiones de la beta había expresado mis dudas sobre si la dirección del juego había cambiado y si las misiones aportaban algo de contenido en el juego aún después de terminarlo. Por dicha todo es más claro ahora y me parece que el sistema es mucho más balanceado que antes.

Cabe destacar que Destiny 2 se estrenó el pasado 05 de septiembre para Xbox One y Playstation 4. He tenido la oportunidad de probar una copia enviada por Activision en un PS4 Slim. La versión para PC se lanza en el servicio de Battle.net el 24 de octubre.

La secuela mantiene su esencia de shooter en primera persona en línea con variantes de RPG. Las reglas de juego se mantienen iguales: disparar a todo lo que veas (sólo o en compañía) conforme vayas avanzando con las misiones, subiendo de nivel y explorando nuevos territorios.

Las mejoras radican en dos grandes aspectos: la historia que -¡finalmente!- complementa la ambientación y las reglas de juego que le dan mucho más valor a todo el mundo de Destiny 2, a diferencia del primero.

Destiny 2 respeta su valor y esto lo demuestra simplificando su sistema. Ya no tenemos que ir constantemente a la central social para ir a recoger misiones. Estas aparecerán en el menú principal y se descartan conforme las completes. A la central vas principalmente a recoger tus premios y organizar tu inventario.

Las misiones también cobran más importancia y complejidad que el simple recoge esto y captura lo otro del primer juego. Además de las patrullas, misiones de historia y eventos públicos, tenemos las operaciones y misiones secundarias de la historia. En estas podemos ver una interacción con los personajes que nuevamente marcan cierta empatía con ellos. Cabe destacar que vamos obteniendo objetos de valor para intercambiar con “NPC líderes” de cada mundo, con ellos subimos de nivel y con cada subida regalas engramas con equipos de atributos legendarios o excepcionales, dependiendo de tu suerte.

Es una dicha que los engramas se traten menos como una lotería que su anterior juego. Aquí Bungie deja claro que para ganarlos, tienes que subir el nivel de cada facción. También fue noble que haya dejado los engramas para objetos de mayor valor. Podemos conservar el equipo, o bien, infundirlo. La infusión sirve para subir la potencia general de un equipo a nuestro gusto, dicha potencia nos ayuda a entrar a eventos y misiones de mayor nivel.

La libertad también se nota en los equipos y árbol de habilidades, ahora todo luce más simple y transparente. Cada habilidad del personaje está simplificada, a tal punto que el jugador sólo deberá preocuparse de lo que este necesita según la misión. Habrán misiones en las que ocupas una subclase solar, o bien un salto mucho más controlado.

El diseño de niveles está bastante elaborado. La campaña sirve para introducirnos las mecánicas del juego de forma muy orgánica, mientras que los asaltos, eventos e incursión son una prueba de destreza con tu equipo. Como ejemplo tenemos los asaltos que son revitalizados con acertijos, algunos de ellos retomados de la vieja expansión del primer título, El Rey de los Poseídos.

Hay otros detalles que se sienten frescos. Por ejemplo, el retroceso se siente especialmente bien con el nuevo ajuste de vibración y de las armas. También tenemos el leve agarre en plataformas en caso de que no llegues. Hay habilidades sutiles como el campo de fuerza que brinda salud o daño extra, o bien los impulsos extra en tierra y aire al presionar dos veces O o B.

En cuanto al modo en línea, pues durante todas mis partidas, sólo tuve dos problemas de conexión. La primera me conecté de inmediato al servidor, sin pérdida de datos, y la segunda fue porque era mantenimiento de servidores. Ambos casos son entendibles, dada la naturaleza en línea del juego, así que no encontré por ningún lado esos problemas de los cuáles todos critican en el turbulento y controversial internet.

Eso sí, el modo de juego que más me ha parecido que ha sufrido problemas es el multijugador competitivo, llamado Crisol acá. Entiendo que la intención de Bungie es hacer equipos de 4vs4 y reducir la aparición de las técnicas especiales a apenas 1 o 2 veces por partida era de heredar el espíritu competitivo en las arenas. Tengo recuerdos amargos en el primer Destiny con cazadores masacrando por doquier a guardianes con la infame espada de arco y dejando a su equipo de lado. Sin embargo, cuando me privan casi toda la partida de las habilidades de subclase, veo los principales problemas de diseño de cada arena. Estos se sienten muy simples, con pocos puntos de encuentro enemigo y de defensa, resolviendo todo con el primero que ha jalado el gatillo al toparse. Ya hay juegos como LawBreakers, Titanfall 2 u Overwatch que lo hacen mucho mejor y no necesitan privar de sus habilidades, porque los niveles se prestan para una estrategia de evasión y ofensiva con cientos de posibilidades. Quizá Bungie debería replantearse los enormes mapas creados en Halo, los cuáles fueron su más grande logro y aporte al género.

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Contenido

La campaña de Destiny 2 puede tener los momentos más clichés de todo videojuego, y si bien esto ha traído varios problemas en el guión, es una experiencia disfrutable que ahora sí está a la altura de lo que Bungie hacía en sus años de oro. Incluso podría decirse que enriquece toda la historia implícita detrás de lo que vemos en las cinemáticas y lo que los personajes nos cuentan.

Primus Ghaul es un líder militar de la Legión Roja de los cabal, un ejército que vino a reclamar el poder de El Viajero. Su primera movida es destruir la Última Ciudad de la Tierra con la finalidad de debilitar las fuerzas guardianas. Mientras ocurre la Guerra Roja, Ghaul secuestra al Orador, el único ser vivo que ha podido comunicarse con El Viajero, esto para poder obtener el secreto para adquirir sus poderes ocultos. Tu misión como guardián será de restaurar todos los poderes que te arrebataron y contraatacar la fuerza devastadora de los cabal a través de toda la galaxia.

La campaña se preocupa por los personajes que antes eran simples menús de facciones para demostrarnos su importancia y relación con nuestras clases guardianes. Ahora Zavala, Cayde-6, Ikora Rey y otros altos mandos se han dispersado para buscar formas de detener a la Legión Roja. Gracias a ellos, aprendemos que la experiencia militar del general Zavala lo ha llevado a liderar los asaltos, misiones cuya finalidad consiste en detener otros ejércitos que amenacen a El Viajero y la humanidad. La hechicera Ikora Rey es la estratega que nos ayudará encontrar tecnología antigua con información vitalicia, mientras que Cayde-6 es el encargado de la mayoría de misiones y patrullas que recolectan información y por supuesto, equipos. Otros personajes como Suraya Hawthrone y Amanda Holliday operan en distintas misiones de forma conjunta con otros líderes del resto de destinos que se relacionarán entre ellos de una forma que pocas veces se ve en un RPG.

En realidad me esperaba el típico esquema de “haz la misión y vuelve por la recompensa”, sin embargo acá van un poco más allá con esta clase de detalles. Cosas como diálogos fluidos, eventos que ocurren en tiempo real. Lo interesante es que la mayoría están correlacionados a la historia. Aunque aclaro, puedes omitir todo esto para concentrarte a subir de nivel, total esa es la intención oscura de este juego, sumergirte de lleno y que no necesites otro título más. Esto la verdad depende de los gustos. También está la opción de jugar a tu ritmo, a menos que juegues con amigos a las incursiones y asaltos, algo de lo que hablaré luego.

Si hay algo que no convence es -irónicamente- el protagonista principal. Los diálogos en muchas ocasiones se sienten torpes, diciéndote cosas obvias como “creo que vamos a matar un jefe” cuando sabes que ese es el objetivo principal desde el inicio. El sentido de la pérdida la verdad que ni se siente y hace que ese primer momento en el que nos arrebatan nuestros poderes se ignore completamente una vez que llegamos a recuperar los poderes con el fragmento de un viajero. Y esto ocurre en la segunda misión. Esa idea que vendió Bungie de tener que crecer desde cero se pierde. Aún así, el juego no es fácil, pero su guión no convence del todo.

Respecto al equipo, este tiene muchas armas nuevas que crean gran balance. De los tres tipos (cinéticas, energéticas y potentes), las energéticas han apostado por ofrecer más variedad de equipos vistos en las cinéticas como fusiles de pulsos y de exploración, con la diferencia de que tienen propiedades elementales ya sea solar, vacío o arco. Dentro de las armas nuevas, tenemos lanzagranadas, espadas y el fusil rastreador. Este último es como el equipo de protones de los Cazafantasmas. Incluso me he topado propiedades únicas para un tipo de arma, como por ejemplo la Bobina de Wardcliff, un tipo de lanzacohetes que dispara una salva de cohetes, o Borealis, un franco que goza de las tres propiedades elementales.

Existen monedas las cuáles puedes obtener por medio de dinero real y así comprar engramas legendarios de objetos al azar en el Eververso. Esto sorpresivamente no compromete la jugabilidad y más bien se siente como un intento noble. Y es que eventualmente puedes obtener engramas, armas legendarias y excepcionales con facilidad sin optar por gastar dinero. También puedes pintar tus equipos por separados con shaders. Esto es bueno en parte, el asunto es que su uso es finito y no alcanza para lo que queramos. Si alguien quiere obtener shaders en ocaso o incursión, se verá obligado a jugarlo muchas veces. Quizá aumentar la cantidad de uso resolvería el conflicto.

En el juego tenemos cuatro nuevos destinos por explorar, la Zona Muerta de la Tierra, las lunas de Io y Titán, y Nessus. Cada uno de ellos goza de eventos, misiones de la campaña, operaciones, tesoros, patrullas y eventos públicos. Y la mayoría aportan algo a la historia de Destiny 2 y variedad en acertijos.

Por ejemplo, en un evento público de la Tierra, debemos derrotar a un caminante con ayuda de armas. Si desbloqueamos todas las armas con ayuda de unos orbes que el enemigo libera al recibir daño, podremos derrotarlo más antes y obtener mejores recompensas. El juego te premia lumen (dinero) extra o -si tienes suerte- con engramas leyenda o excepcionales. Es una dicha que ahora podremos buscar clanes y grupos de forma más accesible, al menos en este modo.

Luego está el modo Incursión, que consta de resolver duros acertijos y enfrentamientos sin ayuda del juego y con la ayuda única de tus camaradas (a menos que veas tips en Youtube de forma desinteresada). Con lo jugado pude experimentar el primer reto con 5 de nuestros camaradas de nuestro clan. El objetivo requería obtener estandartes y colocarlos uno por uno, mientras protegemos el área donde los colocamos. Si un enemigo se mantiene por cierto tiempo en dicha área, el estandarte desaparecerá y tendremos que repetir la hazaña. Es un nivel que requiere mucha coordinación con tus compañeros y que también rescata el espíritu inicial del cooperativo en las incursiones.

A pesar del esfuerzo de Bungie por resolver la ausencia de jugadores en clanes para incursiones y asaltos, considero que aún no lo han logrado debidamente. Es cierto que ahora tenemos clanes integrados en el juego y bonus de experiencia de clan, sin embargo, sigue siendo complicado coincidir horas con todos los jugadores y el reinicio semanal de servidores para ocaso e los puntos de control de incursiones se vuelve más una frustración.

Considero que Bungie debe ser más consciente del tiempo del jugador (¿Quizá reiniciar el servidor cada dos semanas funcione mejor?). Creo que tenemos otros títulos por jugar además de Destiny 2 y otras cosas por hacer como para hacer esto de la incursión una encrucijada contra el tiempo. Existen los tiquetes en los que nos unimos a otros jugadores para ayudarles, pero eso tampoco ayuda mucho, porque eventualmente no sólo tendrás que hablar el mismo idioma con otro jugador desconocido, sino que debemos sincronizarnos entre 6 personas. Es una lástima, considerando que la incursión de Leviatán es una genialidad de diseño y dificultad. Fuera de todo, la he pasado genial con el nuevo clan.

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Gráficos

Si hay algo que me hace volver a Destiny y sentirme cómodo es su dirección artística y apartado visual. todas las texturas de los planetas y satélites lucen mucho más coloridas y sus diseños conservan estéticas muy originales. Por ejemplo, tenemos a un Titán cubierto de agua en su mayoría, con ciudades de la Edad de Oro en la ruina, azotadas por la inmensidad marítima. Luego tenemos los cañones de Io con una paleta increíble de colores a causa de sus constantes erupciones que emula la apariencia de dicho planeta.

Las animaciones siguen siendo bastante fluidas, en eso nada ha cambiado con respecto a su antecesor. Sí debo decir que el peso de las armas y las propiedades se sienten. El correr y saltar suponen un peso extra al jugador, otorgando una sensación más humana de movimiento.

A nivel técnico corre bastante bien a 1080p y 30fps, con detalles que se dejan ver a la distancia sin problemas de texturas, sombreado y bordes. Tampoco es que haya podido probar los aparentes 4k en el PS4 Pro. Lo mejor es que Bungie lanzará pronto una actualización para visualizar Destiny 2 en HDR.

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Sonido

Puedo notar la ausencia de Marty O’Donnell en la banda sonora de Destiny 2. Los silencios y la longitud musical ya no forman parte de la banda sonora, sino que han optado por una dirección un poco más dramática, aunque quizá menos inspirada. Sin embargo, si hay melodías que bajo el liderato de C. Paul Johnson se escuchan de forma soberbia, en especial las del centro social y las de Titán.

Y aunque cueste creerlo, las nuevas voces en español latino convencen mucho más que el mismo doblaje al inglés. Estas les dan mucho más vida a los personajes y nos convencen de sus intenciones. Sin ellas, no podríamos empatizar con la personalidad sarcástica de René García (Vegetta) como Cayde-6, el convincente Sebastián Llapur (Marcus Phoenix) en su papel como Zavala o Jessica Ortiz como Failsafe, quien ha rendido cierto tributo a lo que fue GLaDOS en Portal.

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Conclusión

Lo bueno de Destiny 2 no es tanto que haya contenido después de una muy buena campaña, sino que ese contenido enriquece la experiencia jugable tanto en solitario como en cooperativo. No es cualquier estudio el que decide embarcarse en un proyecto de esa magnitud y sustenta un balance entre las decisiones corporativas de Activision, calidad y sus fans. Si bien difiero ante todo por este precio y sus ediciones de lujo, creo que el mismo servicio es demandado por sus fans. Bungie también está (ligeramente) obsesionado por este juego y creo que eso ha llevado a este shooter en línea a convertirse en un ejemplo a seguir en juegos en cooperativo. Si quieres formar parte de esta experiencia con tus amigos, eres bienvenido, pues le sacarás mucho más provecho que su antecesor, aunque eso sí, lo recomiendo si crees tener suficiente tiempo para él.

Lo Bueno

• La historia se siente más compenetrada con el mundo del juego.
• Nuevo sistema de misiones te ahorra tiempo y enriquece la experiencia jugable.
• Nuevo sistema de equipos otorga mayor libertad de escogencia al jugador.
• Doblaje latino soberbio.
• Genuina dirección artística y diseño de niveles nos introducen perspectivas interesante de nuevos mundos.

Lo Malo

• Modo Crisol se siente anquilosado en comparación a otros Shooter competitivos.
• Torpeza en algunos diálogos genera argumentos poco convincentes de la historia.
• Poca personalización de nuestro guardián.
• Bungie no está consciente del tiempo del jugador.

Puntaje:

• Jugabilidad: 8
• Contenido: 7
• Gráficos: 9
• Sonido: 8

Calificación: 8