Análisis de Strafe
La década de los 90 se puede definir con una palabra: Radical (o simplemente rad). Los comerciales más extremos de videojuegos azotaban en la televisión y revistas, y con ello vino el nacimiento de los juegos violentos. Algunos como Quake y Doom nos recuerdan aquellos tiempos en los que nada más tenías que acabar con tus enemigos, sin guías ni vidas infinitas. Esta es justamente la base de Strafe, un juego que quiere revivir aquellos tiempos a su propia manera.
Jugabilidad
Strafe es un Shooter en primera persona para PC y PS4 enfocado únicamente en la experiencia arcade para un jugador. Para este análisis tuvimos el gusto de probar ambas versiones. Su plato fuerte es una campaña de cuatro áreas, cada una con 3 niveles que se crean de forma autogenerada. Esto quiere decir que en cada partida que juegues tu experiencia será totalmente diferente.
El título se juega como cualquier otro shooter: matando todo lo que se te cruce, sólo que con gran de dificultad. Antes de comenzar, tienes que escoger el arma principal, ya sea escopeta, metralla o rayo láser. Estas tendrán una cantidad considerable de munición y te pueden rendir lo suficiente si eres certero con los tiros en la cabeza, por ejemplo. También hay armas con municiones más limitadas -pero más poderosas- que nos encontraremos en el camino.
Los enemigos usualmente corren hacia tí y te atacan con armas de cuerpo a cuerpo. Habrán otros que también te dispararán. No es complicado enfrentarse a uno sólo, lo difícil es enfrentarse a una cantidad de ellos y saber defenderte mientras te mueves. Sumémosle que cada nivel es prácticamente nuevo, por lo que siempre será una nueva experiencia.
Hablando de los niveles autogenerados, estos pueden ser una experiencia frustrante o bien un reto supremo. la construcción de estos funciona bastante bien. No encontré callejones sin salida o espacios desperdiciados en mi mayoría de rondas de juego, algo que no es sencillo de desarrollar.
Los niveles usualmente tienen plataformas, ascensores, una máquina dispensadora de vida, otra para comprar balas y escudos y otra para cambiarle las propiedades a tu arma. Gracias a esto podemos tener desde balas explosivas hasta disparar en secuencia de ráfaga.
El problema viene con la ubicación de enemigos que en ocasiones puede arruinar toda tu experiencia. Hablamos de un juego con una única vida (permadeath) y sin posibilidad de guardar tu progreso. Un paso en falso puede enviar a la basura todo tu progreso en segundos con hordas de enemigos en puntos no visibles. Es entendible que es parte del juego. Pero el problema es que dicha mecánica no se siente balanceada. Una sesión de juego te sobran las armas secundarias, en otra no. En otra ocasión debes matar a un grupo de enemigos y gastar la mayoría de tu munición, para luego toparte otra horda de enemigos en un lugar con poca munición. Aquí es donde el principio del roguelike o creación de niveles autogenerados se derrumba y por ende ha creado línea muy divisoria entre gente que le ha gustado o no el juego.
Esa fue mi primera impresión del juego tras decenas de intentos de sobrepasar la primer área del Ícaro. Sin embargo, se siente un espíritu de competitividad que gradualmente fue creciendo y esto es algo de lo que goza fuertemente el título, si eres una persona paciente que disfruta de los retos y de litros de sangre de tus enemigos (¡También cuenta!). No obstante, también hay uno que otro problema técnico. En una ocasión perdí una llave para una puerta por lanzarla al suelo. Tuve que volver a comenzar todo de nuevo, pero nuevamente tentado a conocer la segunda área. Y no soy el único. Con base en los trofeos de PS4, apenas un 8% ha pasado la segunda área, para que se den una idea. No sería mala idea hacer un punto de control por cada nivel, al menos para conocer lo que viene a futuro. Incluso el mismo Doom hacía eso en su tiempo.
Contenido
Strafe goza de un buen nivel de jugabilidad, gracias a su cantidad infinita de niveles. También tenemos una cantidad moderada de enemigos, aproximadamente cuatro tipos por área, todos con un comportamiento distinto. También tenemos versiones de los mismos enemigos pero con más armadura.
Adicionalmente, existe un modo de juego llamado Murder Zone. Este básicamente es un modo horda, una arena de 10 rondas en donde saldrán una gran cantidad de enemigos que tendremos que eliminar para ir avanzando. Aquí sí podremos escoger la zona de juego, basados en el diseño de cada área. Cabe destacar que iremos desbloqueando nuevas zonas si alcanzamos dichas áreas durante la campaña. Al final iremos sumando el total de litros de sangre derramada de todas nuestras partidas.
Adicionalmente tiene un tutorial, que en realidad fue puesto de manera intencional y de forma satírica, haciendo alusión a los tutoriales de los programas de Windows 95 y ¿quizá los terribles juegos del Phillips CD-i? En fin, en estos sale una actriz guiándonos bajo el mejor estilo de full motion video sobre el área de juego.
Gráficos
Como era de esperarse, el apartado visual de Strafe tiene un estilo retro, alusivo -nuevamente- a shooters como Quake, con acabados cuadriculados de aquel entonces. De la misma forma funciona el menú, el cual tiene los accesos rápidos al lado de cada opción, como en los viejos títulos de MS-DOS.
El asunto es que dicho apartado visual luce un poco más limitado que inclusive los shooters de antaño. No se siente esa intensidad que incluso en los comerciales del juego se ve, que supongo era parte del punto, aspectos que otros Indies sí han logrado bajo una dirección artística similar. Lo que podría rescatar es la excesiva cantidad de sangre que podremos derramar a lo largo del juego. Claramente este se ha lucido bastante con ello.
A nivel técnico ha sido toda una odisea. En un principio el juego tenía muchos picos de caídas al finalizar cada nivel. Esto porque el juego carga el siguiente nivel justo antes de terminar el anterior. Si bien los niveles se construyen de buena manera, para el jugador esto puede terminar en frustración, en especial para los jugadores de PC. Posteriormente el estudio Pixel Titans lanzó un parche gratuito para controlar estos tiempos de carga y caídas, el cual ha funcionado bastante bien tanto para PS4 como para la versión de PC. Incluso puedes ver que los usuarios han lanzado reseñas positivas respecto a la mejora que ha tenido a nivel técnico, lo cual dice mucho de parte del estudio.
Sonido
Podría ser el apartado más flojo y que más hizo falta. Los sonido son muy planos y genéricos, tanto los de ambiente como los de los enemigos. Originalmente el juego se había lanzado sin efectos de sonido específicos en las armas. Esto es esencial para todo Shooter, incluso para los de aquella época era escuchar el impacto de la bala.
El estudio agregó más efectos de sonido para las armas en el mencionado parche, así también como el sonido de los pasos de los enemigos. Esto mejoró mucho más ambas versiones de Strafe y volvió el juego un poco más ameno. Sin embargo todavía falta intensidad y ese impacto que sientes cuando disparas un arma.
La banda sonora es apropiada, en ocasiones desentonada con la acción, quizá muy al estilo de electrónica y menos del estilo que sí recuerdo de 1996 con ritmos metaleros. Es un trabajo destacable departe del compositor, ToyTree. Acá les dejo la banda sonora de Spotify para los curiosos:
Conclusión:
Strafe es un juego que posiblemente nunca termines, pero que te va a enganchar si eres de los que degustan del reto. Su diseño de niveles autogenerados nos brindan bastante rejugabilidad, pero algunos aspectos crean desbalance a lo largo de los intentos de juego. Este posee suficiente contenido, el problema es que el jugador no podrá disfrutarlo a menos que logre avanzar y esto arriesga a que nunca veamos el valor de su compra. Eso sí, gozó de un excelente mercadeo para un juego bastante divisorio de la forma más irónica posible.
Lo Bueno:
- Nivel alto de rejugabilidad y de enganche en ocasiones.
- Interfaz retro con factor nostalgia.
- Los litros de sangre como puntaje principal del juego brinda dosis de diversión.
Lo Malo:
- Desbalance en los niveles.
- Apartado sonoro mediocre.
- No terminas de disfrutar todo el contenido.
Puntaje:
- Jugabilidad: 7
- Contenido: 6.5
- Gráficos: 6
- Sonido: 5