4 Razones Por Las Que Debes Jugar Life is Strange

A una semana del lanzamiento de su quinto episodio, con el cual cerrará su primera temporada, Life Is Strange (LiS), desarrollado por Dontnod Entertainment se ha consolidado como uno de los candidatos favoritos a juego del año para muchos. Si nunca has oído nombrar esta franquicia, he aquí 4 buenas razones (libres de spoilers) por las cuales no te lo puedes perder.

Mecánicas simples, decisiones importantes

El género de Aventura Gráfica ha visto un resurgir en los últimos años gracias principalmente al trabajo de TellTale Games con ambas temporadas de The Walking Dead, su trabajo en The Wolf Among Us, y sus proyectos actuales de Game of Thrones, Tales From The Borderlands e incluso Minecraft: Story Mode (si, modo historia, para Minecraft). Perteneciendo al mismo género, las mecánicas de LiS son extremadamente simples. Esto funciona a su favor: alcanza un público más amplio, más interesado en historia que en competitividad, y se convierte en el tipo de juego que todos pueden aprender a jugar en pocos minutos.

Habiendo dicho esto, hay que hacer una aclaración: la simpleza de su modo de juego no le resta nada a lo interesante de la experiencia.

En LiS, el jugador asume el rol de Maxine “Max” Coulfield, una adolescente de 18 años que regresa al pueblo de su niñez luego de años de ausencia para asistir a un instituto privado donde estudia fotografía. Luego de apocalípticas visiones sobre un huracán que arrasará con la ciudad y por razones aún desconocidas, Max obtiene la habilidad de regresar el tiempo (hasta un cierto límite) sin que nadie más que ella pueda notarlo.

Este poder le permite a Max enmendar errores o prevenir accidentes, dotando al jugador con la oportunidad de ver el resultado de sus acciones inmediatas sin comprometerse a hacerlas permanentes. Es una mecánica simple, interesante, y utilizada tan inteligentemente que no permite su abuso: las consecuencias a largo plazo son impredecibles aún, por lo que debe usarse sabiamente.

Personajes complejos y no clichés

Mucho del afecto que los fans han desarrollado por los personajes de esta historia se debe al hecho de que, aún cuando a veces rozan con algunos arquetipos (el nerd, la popular, el matón), muchos de los personajes se sienten, hablan y se expresan como lo harían personas reales de su edad y circunstancias.

Las relaciones amistosas y románticas de los personajes son tratados dentro de la historia de forma muy auténtica, con una que otra línea cursi en el guión, pero sin convertirse nunca en un romance o drama. Esto hace que los personajes cobren vida más a diferencia del estándar de muchos otros videojuegos, donde los protagonistas casi siempre se limitan a 1) ser muy buenos matando cosas y 2) contar un chiste luego de matar alguna cosa. LiS es un juego de narrativa, y logra que el jugador se involucre en las situaciones complejas y a veces trágicas de su historia.

Balance perfecto de ciencia ficción y drama

Como algunos filmes como The Matrix y The Adjustment Bureau pueden atestiguar, la mejor ciencia ficción es la que no es el centro de una historia, sino que más bien sirve para potenciar las situaciones y conflictos humanos en ellas.

Con este estilo narrativo, LiS hace de la manipulación del tiempo (y espacio, en algunas ocasiones) un conducto a momentos intensos, trágicos y a veces heróicos, y no simplemente como una mecánica más que, con otro enfoque, podría más bien eliminar todo el peso de las acciones del jugador.

Los poderes de Max tienen límites y consecuencias, y es encontrando los bordes de ambos donde la historia nos entrega sus mejores momentos.

Un misterio que se revela por capas

Como toda buena historia de misterio, cada respuesta abre más interesantes y peligrosas preguntas. Lo que en un principio parece ser una simple búsqueda de una persona perdida comienza a revelar el lado oscuro de una ciudad, y a medida que el guión se complica, eventos extraños e inexplicables comienzan a darse también a nivel sobrenatural. Cada capítulo ha introducido un evento mayor en la historia, y algunos han logrado que hasta el jugador más apático se tome un momento para reflexionar sobre su significado y los posibles escenarios alternos.

Es esta mezcla lo que hace que LiS se sienta tan único e atractivo. Además, su modelo episódico, el cual incluye un trailer de la siguiente parte de la historia al final de cada capítulo, permite que semana a semana los fans discutan los eventos como lo harían con una serie de televisión, pero a diferencia de ésta, pueden además compartir las decisiones tomadas y comparar las diferentes versiones de la historia según la forma en que se juegue.

Aún cuando no es perfecto, Life is Strange ha conseguido reavivar el entusiasmo de muchos fans en este género de juego, y sin duda, muchos estarán atentos al lanzamiento de su episodio final la semana próxima.